Los hoteleros españoles exigen la suspensión y exoneración de impuestos municipales, autonómicos y nacionales ante el cese casi total de actividad y para proteger la liquidez de las empresas que no están operativas.

La Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (CEHAT) ha urgido también en una nota que se permita a los hoteleros la bajada de potencia eléctrica y de caudal de gas sin penalización, en función de la actividad, porque actualmente están pagando entre 2.000 y 3.000 euros mensuales por establecimiento de un servicio que no usan.

La organización recuerda que actualmente solo está abierta el 15% de la planta alojativa en toda España, con una ocupación que ronda el 10%.

Asimismo, continúa diciendo que pese a la inactividad impuesta por la pandemia y las pocas expectativas del demanda, los hoteleros tienen que seguir haciendo frente a gastos "inadmisibles y carentes de sentido en un contexto como el actual".

Entre estas cargas se encuentran, por ejemplo, la tasa de residuos urbanos de actividades, la de paso de vehículos, la de ocupación de vía pública, el Impuesto sobre Actividades Económicas (IAE) o el Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI).