El colectivo saharaui de Lanzarote asegura que el pasado domingo, 17 de octubre, atracó en el puerto de Los Mármoles el carguero Dura Bulk con un cargamento de unas 30.0000 toneladas de arena procedente de El Aaiún.

El barco, operado por la naviera Arabella Enterprise, tiene sede en Panamá pero su capital es cien por cien de la empresa Camarex, con sede en Canarias. Según el colectivo saharaui, Arabella pertenece a un conglomerado empresarial en torno a Yesos de Canarias, del que el Gobierno de Canarias tiene una participación superior al veinte por ciento.

El colectivo señala que el 29 de septiembre pasado el Tribunal General de la Unión Europea emitió dos sentencias que reiteran la doctrina anterior del Tribunal de Justicia de la UE en 2018 y 2019, que confirmaban que el Sáhara occidental y Marruecos son dos territorios diferentes y que la potencia ocupante no puede explotar los recursos naturales del Sáhara sin el consentimiento del Frente Polisario, como representante del pueblo saharaui.

Según afirma el colectivo saharaui, ninguna de las empresas citadas cuenta con esa autorización para importar arena desde el Sáhara. Recuerda, a su vez, que Marruecos utiliza todos los medios a su alcance para impedir que el pueblo saharaui ejerza su derecho a la autodeterminación.

“Con el dinero por este tráfico ilícito de arena, estas empresas financian la colonización del Sáhara Occidental y eso es un crimen de guerra”, aseguran. El colectivo se ha dirigido a las autoridades competentes para frenar este tráfico, sin haber obtenido respuesta. “Mientras estas autoridades miran para otro lado frente a este tráfico ilícito, el pueblo saharaui sigue pagando con el dolor del exilio, la persecución a las activistas en los territorios bajo ocupación  marroquí como las hermanas Jaya en Bojapor o la reanudación de la guerra”, señala Bachir Abdalá Brahim, presidente del colectivo.